En este Blog un HERMANO HOSPITALARIO DE SAN JUAN DE DIOS" vuelca sus experiencias, intuiciones, vivencias, sueños, oraciones, etc...desde la propia vida y pretende ser un vínculo y cauce de comunicación entre quienes vibren y compartan el mundo de la Solidaridad y Hospitalidad desde San Juan de Dios y todas sus gentes en cualquier lugar del mundo. Y, como él, abiertos a cualquier opinión, idea, sugerencia que busque el desarrollo y humanización de toda persona.
CONTAGIANDO HOSPITALIDAD
JUNTOS CONTAGIANDO LA HOSPITALIDAD DE SAN JUAN DE DIOS
05 enero 2012
CORRECCIONES
"ES MEJOR SER CORREGIDO POR UN SABIO QUE ADMIRADO POR UN NECIO" (Platón)
3 comentarios:
Anónimo
dijo...
unchumapero ¡que difícil es saber recibir una corrección...! y qué curioso... es más frecuente recibirla de un necio...
Pues estoy de acuerdo. Es más que frecuente el tener que aguantar "correcciones" de gente más bien inepta, pero quizas venga pr ahí la sabiduría...en saber encajar cada cosa "en su lugar". Sin ignorar que la corrección siempre cuesta tanto al que la recibe como al que, sana y buenamente, la tiene que realizar sobre otros.
Pues estoy de acuerdo. Es más que frecuente el tener que aguantar "correcciones" de gente más bien inepta, pero quizas venga pr ahí la sabiduría...en saber encajar cada cosa "en su lugar". Sin ignorar que la corrección siempre cuesta tanto al que la recibe como al que, sana y buenamente, la tiene que realizar sobre otros.
3 comentarios:
unchumapero ¡que difícil es saber recibir una corrección...! y qué curioso...
es más frecuente recibirla de un necio...
Pues estoy de acuerdo. Es más que frecuente el tener que aguantar "correcciones" de gente más bien inepta, pero quizas venga pr ahí la sabiduría...en saber encajar cada cosa "en su lugar".
Sin ignorar que la corrección siempre cuesta tanto al que la recibe como al que, sana y buenamente, la tiene que realizar sobre otros.
Pues estoy de acuerdo. Es más que frecuente el tener que aguantar "correcciones" de gente más bien inepta, pero quizas venga pr ahí la sabiduría...en saber encajar cada cosa "en su lugar".
Sin ignorar que la corrección siempre cuesta tanto al que la recibe como al que, sana y buenamente, la tiene que realizar sobre otros.
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