Hola a todos:
Después de todo el día de ayer de desconexión, relax, reposo y tranquilidad, uno vuelve a la marcha del día a día.Supongo que muchos de vosotros también habreis empezado hoy a trabajar por lo que mis felicitaciones y muchos ánimos para todos.Yo estoy todavía aterrizando de tantas pequeñas experiencias que he podido vivir a lo largo de estos días en el Camino de Santiago.
He estado haciendo el Camino Santiago desde Leon a Pie desde el 19 al 30 de Agosto.
Creo que han sido unos días muy intensos, llenos de alegrías, penurias, anécdotas, sufrimientos: si porque no decirlo también.... atrás quedaron etapas del camino interminables, fuentes inagotables de agua que decía la gente que veríamos y que nunca encontrábamos, sombras de árboles que nos cobijaban en los momentos de descanso, bocadillos inimaginables e interminables, peregrinos abiertos a la vida y al compartir.... Vamos que no me voy a poner ahora filosófico.Me siento muy feliz por haber podido vivir la experiencia del camino, para mi ha sido un regalo. Es impresionante descubrir que uno puede ser feliz con 4 cosas metidas en la mochila. Cuantas cosas tenemos en nuestra casa que no sirven para nada. He llegado a valorar el poder llevar encima unos imperdibles para colgar la ropa en la mochila para que se secara....
Son muchos los momentos que podría destacar de esta experiencia:ese trago de agua compartido por un peregrino que posiblemente no verás más en la vida, esa chocolatina en momentos de desánimo, esa canción, por absurda que fuera en los tramos interminables de las etápas, ese juego en las subidas, esa sonrisa en el desayuno. También doy gracias a Dios porque a través de los momentos de incertidumbre, de pesimismo y desánimo hemos podido compartirlo con alguien del grupo. Así es la vida, momentos de alegría y momentos de tristeza, ambos inseparables pero que si los compartimos, se engrandecen y empequeñecen.Esta peregrinación hacia Santiago nos haya hecho recapacitar en nuestra vida y nos ha ayudado a descubrir que en medio de las alegrías y de la desolación la hospitalidad del camino nos invita a relativizar y a quedarnos con la meta que nos unía a todos para hacer el camino: Peregrinar al Sepulcro del apostol Santiago para presentarle nuestras esperanzas e inquietudes.El camino Santiago comienza ahora, es momento de seguir peregrinando y poniendo nuestra confianza en Dios para que se Él quien nos guié en el camino de la vida.
Os invito a que un año de estos podais volver a hacer la experiencia del camino, seguro que os cambia algun aspecto de la vida.
Bueno aquí teneis un poco de mi experiencia personal del camino. .
Un abrazo a todos y hasta pronto.
LUIS MARZO
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