CONTAGIANDO HOSPITALIDAD

CONTAGIANDO HOSPITALIDAD
JUNTOS CONTAGIANDO LA HOSPITALIDAD DE SAN JUAN DE DIOS

17 julio 2006

HELP


Help!

Creo que tengo que ser valiente y contar esta situación, necesito apoyo y comprensión de las personas que están a mí alrededor.

Hace ya algunos meses que me he dado cuenta que mi comportamiento no me gusta, me he vuelto bastante agresivo, negativo. Cualquier acto o comentario que me moleste me irrito con bastante facilidad y levanto la voz, o actúo agresivamente. Aún no he pegado a nadie, pero tengo miedo que algún día lo haga.

Esto me ha hecho pensar en mi infancia. Cuando yo era pequeño, siempre decía que jamás sería como lo que estoy describiendo, y menos llegar a las manos. Sufrí muchos años la agresividad y los múltiples maltratos físicos y psíquicos de mi propio padre. Me prometí a mi mismo, que jamás sería como mi padre pero, cada vez que alzo la voz o soy tan negativo, me parece que me parezco a mi padre.

Esta situación, me hace sentir culpable de todo lo que supuestamente hago mal, hasta deprimirme de tal modo que llevo unos cuantos meses con tratamiento farmacológico, con paroxetina. La verdad es que he mejorado bastante, aunque de vez en cuando, cuando levanto la voz, vuelvo a sentirme fatal.

No soy capaz de retenerme cuando algo o alguien me irrita, he contado hasta diez, veinte y treinta, y no puedo. Cuando esto sucede, en ocasiones, lloro por el sufrimiento que paso, me doy cuenta de lo que he hecho y más sufro cuando les hago sufrir a los demás.

Por suerte, siempre hay alguien que hace de salvavidas para estos momentos angustiosos para mí. Muchas veces me siento egoísta por abrazarme tantas veces a esos salvavidas que me quieren ayudar. No saben, ni les he dicho, lo mucho que les quiero y lo agradecido que estoy de tenerles como familia y amigos.



1 comentario:

pablo gil corona dijo...

POR LAS REVOLUCIONES QUE ESTÁN POR VENIR... POR LO QUE ESTÁ POR SUCEDER...POR LO BUENO QUE TAMBIEN SUCEDE....

"Sucede que a veces la vida mata y el amor
te echa silicona en los cerrojos de tu casa,
o te abre un expediente de regulación,
y te expulsa del Edén, hacia tierras extrañas.
Sucede que a veces sales de un bar y la luz
quema la piel de este vampiro que te ama,
te llena la frente de fino polvo marrón-sur,
bostezas y te queman agujetas en las alas.

Pero sucede también
que, sin saber cómo ni cuándo,
algo te eriza la piel
y te rescata del naufragio.

Y siempre es viernes, siesta de verano,
verbena en la aldea, guirnaldas en mayo,
tormentas que apagan el televisor.
Teléfonos que arden, me nombra tu voz,
hoy ceno contigo, hoy revolución,
reyes que pierden sus coronas,
verte entre la multitud,
abrazos que incendian la aurora
en las playas del sur.

Sucede que a veces la vida mata y te encuentras
solo y en este corazón no reciclable
se hunden petroleros desahuciados y sospechas
que provocan miopía en lanzadores de puñales.
Sucede que a veces la vida mata y el invierno
saca su revólver, te encañona en las costillas,
te aterran los álbumes de fotos y el espejo,
huele a pino el coche y el mar a gasolina.

Pero sucede también
que, sin saber cómo ni cuándo,
algo te eriza la piel
y te rescata del naufragio.

Y siempre es viernes, siesta de verano,
verbena en la aldea, guirnaldas en mayo,
tormentas que apagan el televisor.
Teléfonos que arden, me nombra tu voz,
hoy ceno contigo, hoy revolución,
reyes que pierden sus coronas,
verte entre la multitud,
abrazos que incendian la aurora
en las playas del sur.

Sucede que a veces la vida mata...
Y siempre es viernes, siesta de verano...
Hoy ceno contigo, hoy revolución..."(ISMAEL SERRANO)