CONTAGIANDO HOSPITALIDAD

CONTAGIANDO HOSPITALIDAD
JUNTOS CONTAGIANDO LA HOSPITALIDAD DE SAN JUAN DE DIOS

07 mayo 2008

DESDE ETIOPÍA


Una historia de Etiopía nos presenta a un anciano que, en su lecho de muerte, llamó a sus tres hijos y les dijo:

"-No puedo dividir lo que poseo. Eso dejaría muy pocos bienes a cada uno de vosotros. He decidido dar todo lo que tengo, como herencia, al que se muestre más hábil, más inteligente, más astuto, más sagaz. Dicho de otra forma, a mi mejor hijo. He dejado encima de la mesa una moneda para cada uno de vosotros. Tomadla. El que compre con esa moneda algo con lo que llenar la casa se quedará con todo."

Ellos se fueron. El primer hijo compró paja, pero sólo consiguió llenar la casa hasta la mitad. El segundo hijo compró sacos de pluma, pero no consiguió llenar la casa mucho más que el anterior. El tercer hijo, -que fue quien consiguió la herencia-, sólo compró un pequeño objeto: era una VELA; esperó hasta la noche, encendió la vela y llenó la casa de luz


No hay comentarios: