Confieso que muy futbolero no soy.
Conversando hoy escucho que un equipo de futbol español de los de 1ª fila está dispuesto a saldar una gran deuda que tiene otro pequeño cuyos jugadores no reciben aportación económica desde hace tiempo.
Realmente me sorprendió, así de primeras, que un "grande" quisiera generosamente pagar la deuda de otro no tan grande.
Estupefacto me he quedado cuando me explican que, por la deuda, el equipo pequeño se había declarado en huelga; eso quería decir que no jugarían un partido con el equipo grande; de ahí se deduce que no hay partido; si no hay partido, no se llena el campo y....¡atención! si no se llena el campo, el equipo "grande" no hace caja ni recibe beneficios.......
¡Terrible! ¿No?
Ya me parecía extraña tanta generosidad.
Esto me ha dado mucho qué pensar acerca de cómo funcionamos en nuestro mundo. ¿Realmente de todo lo que hacemos y nos relacionamos queremos sacar un beneficio? ¿No hay nada que hagamos generosa y desinteresadamente?
¿Merece la pena hacer, vivir, amar...desinteresadamente?
Si es así ¿Cómo entender a los que dicen que quieren "dar la vida", "entregar la vida" por los demás?
No sé, pero a mí me ha dado (y me dará) mucho en qué pensar
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