HACIENDO MEMORIA

A unos días de haber celebrado CAPACHA 2011, el verdadero trabajo va comenzando en cada uno después del aterrizaje en nuestroa auténticos lugares cotidianos.

Os ofrecemos aquí unos retazos acerca del tema que Xoan González (participante en Mesa Redonda) refleja en su Blog. Os iremos colgando trabajos diversos de CAPACHA 2011: "LA FELICIDAD, CRECE DÁNDOLA".

LA FELICIDAD CRECE DÁNDOLA...
… es el lema elegido este año por “Capacha”.


Hace poco más de un mes, concluía una visita por tierras alemanas visitando el Santuario de Nuestra Señora de Kevelaer, y entendía gráficamente qué era eso de una “capacha”. Una “capacha” es una especie de cesto de cuero, estopa, junco o mimbre que se emplea para trasladar diferentes objetos.

Con la misma “capacha” con la que representan al comerciante alemán Heinrich Busman, quien recibió el encargo de la Virgen de construir una Capilla en 1642, se suele representar también al santo luso-español Juan de Dios, pues ambos hombres piadosos se dedicaron, en algún momento de sus vidas, a la venta ambulante.

Me han invitado a participar este sábado en una mesa redonda sobre el tema de la felicidad. ¿Es verdad que ésta crece dándola?.


Huyo de quienes para ser felices se olvidan de si mismos y sólo buscan la felicidad fuera. Creo que he aprendido que para hacer algo digno por los demás debe previamente conquistarse una mínima dignidad que no tiene nada que ver con estudios, posición o posesiones: es necesario “ser primero” para poder “ser para los demás”. Oriente y Occidente deben y pueden aprender: ni a encontrar la felicidad en la contemplación del propio ombligo ni en la espiral continua de buscar vaciarse y llenarse mediante estímulos exteriores.


Estos dieciocho años de trabajo con personas mayores me han enseñado a aceptar que la palabra “conformarse” (que tan machaconamente me han repetido muchos mayores cuando les he preguntado por la clave para haber tenido una vida feliz) puede ser un sinónimo de la tan anhelada “serenidad” que predican las filosofías orientales.


“El secreto de la felicidad es tener gustos sencillos y una mente compleja, el problema es que a menudo la mente es sencilla y los gustos son complejos”, dice Fernando Savater. Coincido con Savater, en el secreto de la felicidad… por eso nos solemos referir a la necesidad de su conquista, pero que nadie se confunda: no se trata de una conquista por las armas, sino todo lo contrario, se parece más al proceso paciente de conquista de la persona a la que ames… y ello tiene más de donación constante y altruista que de esperar rápidas contraprestaciones...